Deus ex machina teatro griego

Deus ex machina definición del teatro griego

Imagínatelo. Llevas años trabajando para preparar una solicitud universitaria digna de la Ivy League. Has sacado sobresalientes en las asignaturas más difíciles, has realizado cientos de horas de servicio comunitario, has superado los exámenes estandarizados e incluso has formado parte del equipo universitario de baloncesto durante tres años consecutivos. Y cuando estás a punto de enviar tu solicitud de admisión, suena el teléfono. Es la oficina de admisiones de Harvard. Dicen que no te molestes en rellenar la solicitud. Te han aceptado. Enhorabuena, empiezas en agosto.

Por un lado, estarías feliz. Vas a ir a la universidad de tus sueños. Pero por otro lado, puede que te sientas un poco decepcionado, ¿verdad? Es decir, has trabajado duro, has dejado de salir con tus amigos para dedicar más tiempo al estudio. Quizá nunca te gustó el baloncesto. Después de todos los sacrificios que has hecho, como que querías ver si podías ganarte ese puesto en Harvard.

Deus Ex Machina significa «Dios de la máquina» en latín, y el recurso existe desde los tiempos del teatro griego. El antiguo dramaturgo Eurípides popularizó la técnica. Sus tragedias colocaban a los personajes en estas situaciones desconcertantes; se esforzaban por resolver sus conflictos sólo para ser salvados de la derrota en el último momento por una forma temprana de efecto especial. A Eurípides le gustaba llevar a los dioses al escenario con la ayuda de una máquina parecida a una grúa. De ahí el nombre, Deus Ex Machina.

Camiseta Deus ex machina

El deus ex machina es una técnica narrativa que los escritores pueden utilizar para resolver problemas aparentemente imposibles en sus tramas. En este artículo describiremos ejemplos de este recurso, desde la Grecia clásica y las obras de Shakespeare hasta la literatura y el cine modernos.

Deus ex machina es un término latino que significa «dios de la máquina». Se refiere a los dispositivos utilizados en los antiguos teatros griegos para traer dramáticamente a un dios (interpretado por un actor) al escenario. Normalmente, la repentina aparición de una deidad conducía a la resolución de todos los conflictos y a un final feliz de la obra.

En la actualidad, el término se utiliza para describir un giro inesperado de los acontecimientos en una historia que aporta una solución conveniente -y muy poco probable- a una crisis. Deus ex machina se diferencia de un giro argumental en que el escritor no deja ninguna pista en las escenas o capítulos precedentes sobre el extraordinario desenlace. En cambio, el cambio en la suerte del héroe sorprende por completo al público.

La mayoría de los lectores, espectadores y aficionados al cine rechazan el deus ex machina. Consideran que esos finales son el último recurso de escritores perezosos que no han logrado formular adecuadamente su trama y, por tanto, deben idear un milagroso plan de rescate. Al público no le importan las sorpresas, pero en ese momento de «¡ah!», quiere un elemento de «debería haberlo visto venir» porque el guionista ha colocado pistas sutiles en la historia de antemano.

Significado de Deus ex machina

Deus ex machina (/ˌdeɪəs ɛks ˈmækɪnə, ˈmɑːk-/ DAY-əs ex-MA(H)K-in-ə,[1] latín: [ˈdɛ. ʊs ɛks ˈmaːkʰɪnaː]; plural: dei ex machina; inglés «dios salido de la máquina»)[2][3] es un recurso argumental por el que un problema aparentemente irresoluble en una historia se resuelve de forma repentina y/o abrupta mediante un suceso inesperado e improbable. [4] [5] Su función suele ser resolver una situación irresoluble, sorprender al público, llevar la historia a un final feliz o servir de recurso cómico[6].

Esquilo lo utilizó en sus Euménides, pero se convirtió en un recurso escénico habitual con Eurípides. Más de la mitad de las tragedias de Eurípides emplean un deus ex machina en su resolución, y algunos críticos afirman que fue Eurípides quien lo inventó, y no Esquilo[9]. Un ejemplo citado con frecuencia es la Medea de Eurípides, en la que el deus ex machina es un carro tirado por un dragón enviado por Helios, el dios del sol, para alejar a Medea, su nieta, de Jasón, su marido, y llevarla a la seguridad de Atenas. En Alcestis, la heroína acepta renunciar a su propia vida para salvar la de su marido Admetus. Al final, Heracles aparece y arrebata Alcestis a la Muerte, devolviéndola a la vida y a Admetus.

Significado de ex machina

Deus ex Machina es un drama griego que se desarrolla en el espacio, a bordo de Cogito, un museo interestelar de la cultura terrestre, a miles, quizá millones, de años de distancia de la Tierra de finales del siglo XXI. Basada en elementos de la tragedia griega, Deus ex Machina es un conflicto padre-hijo entre el inmortal, prometeico e informatizado intelecto del Dr. Waldstein y su mortal, dionisíaco, hijo de carne y hueso, Dion. Padre e hijo luchan por el control mecánico y espiritual de Cogito, un fastuoso museo interestelar de cultura terrestre que se desplaza lentamente por el universo para responder a cuatro preguntas: 1. ¿Cuándo empezó el universo? 2. ¿Dónde y cuándo acaba el universo? 3. ¿Qué ocurrió entre medias? 4. ¿Hay alguien más ahí fuera con quien merezca la pena hablar?

Stephen Hawking. Si tuviera la oportunidad de transferir su mente brillante y eternamente curiosa a un nano-superordenador como Cogito -y despojarse de esa carga mortal que es su cuerpo- y explorar el cosmos por toda la eternidad y satisfacer esas inquietantes curiosidades, ¿aprovecharía esa oportunidad? ¿Aprovecharía esa oportunidad? Por supuesto. ¿Lo haría Steve Jobs? ¿Lo haría Einstein? Uno de los temas de Deus ex Machina es que toda esta fervorosa computación que están haciendo los humanos está evolucionando su propia evolución, de mortal orgánico a inmortal digitalizado, que puede ser de lo que en realidad trata toda esta computación.