Tosca opera teatro real

Sondra Radvanovsky arranca el segundo bis

El hecho de que en este melodrama verista de rivalidades, política, pasiones frustradas y brutal desenlace no se pronuncien ni una sola vez las palabras «honor» o «venganza» da una idea de las intenciones de Puccini de trascender y renovar el marco del melodrama italiano, así como el estilo verista. Prueba de ello es el ritmo casi cinematográfico de la acción dramática, la abundancia de ejemplos de leitmotiv y la masiva orquestación que alcanza sus cotas más altas en escenas como el «Te Deum» o la escena del interrogatorio.  Bajo la mano de hierro del siniestro Scarpia, los amantes Tosca y Cavaradossi no pueden alzar la voz más que para expresar desánimo y derrota, retratados como víctimas. Son creaciones de pleno derecho de un siglo que vio nacer el estado totalitario moderno, la destrucción masiva y el genocidio. Estrenada en el Teatro Costanzi de Roma en 1900, a día de hoy Tosca es una de las óperas más populares e incombustibles. Apta para todos los gustos, llega al escenario del Teatro Real en la producción de Paco Azorín, estrenada en el Gran Teatre del Liceu de Barcelona. Se trata de una versión vibrante y explícita, ambientada en un escenario giratorio acompañado de proyecciones de vídeo.

TOSCA ‘Te Deum’ Puccini – Teatro dell’Opera di Roma

«Recomendable a muchos niveles. Tal vez sea el empate entre la cuidadosa dirección de Benin y el malvado pero humano y creíble Scarpia de Raimondis lo que hace que merezca la pena comprarlo. Es, sin duda, uno de los DVD que más me han hecho reflexionar». (Musicweb International)

«…enormes y unánimes bravos y aplausos para los tres cantantes principales…Más de 15 minutos de aplausos al final de la representación para el exitoso estreno de Nuria Espert en el Real…Un reparto de voces absolutamente magnífico». (El Mundo)

TRAILER | TOSCA Puccini – Teatro Real

Tosca es una ópera en tres actos de Giacomo Puccini con libreto italiano de Luigi Illica y Giuseppe Giacosa. Se estrenó en el Teatro Costanzi de Roma el 14 de enero de 1900. La obra, basada en la obra dramática en francés de Victorien Sardou de 1887, La Tosca, es una pieza melodramática ambientada en Roma en junio de 1800, con el control del Reino de Nápoles sobre Roma amenazado por la invasión de Italia por parte de Napoleón. Contiene representaciones de torturas, asesinatos y suicidios, así como algunas de las arias líricas más conocidas de Puccini.

Puccini vio la obra de Sardou cuando estaba de gira por Italia en 1889 y, tras algunas vacilaciones, obtuvo los derechos para convertir la obra en una ópera en 1895. La transformación de la prolija obra francesa en una sucinta ópera italiana llevó cuatro años, durante los cuales el compositor discutió repetidamente con sus libretistas y su editor. Tosca se estrenó en un momento de agitación en Roma, y su primera representación se retrasó un día por temor a los disturbios. A pesar de la indiferencia de la crítica, la ópera tuvo un éxito inmediato entre el público.

TOSCA 16 1 2011 ÓPERA NACIONAL GRIEGA

Los aficionados a la ópera dependen hoy en día de plataformas como Opera Vision para obtener sus dosis frecuentes de material operístico. Así que, siendo yo uno de ellos, sintonicé la producción del Teatro Real de Tosca de Puccini, esperando la satisfacción que un buen elenco y una buena producción me proporcionarían. No sabía que el director de escena Paco Azorín iba a hacer de las suyas con la joya de Puccini y la dejaría en un estado lamentable, con poco o casi nada de lo que el compositor quería para su obra.

Para empezar, Puccini era extremadamente exigente y siempre demandaba lo que quería de cualquier producción de cualquier ópera suya. En el caso de Tosca, es famosa su exigencia de que un determinado conjunto de campanas de iglesia fuera llevado al teatro donde se estrenó la obra para replicar con autenticidad su sonido exacto en el acto III. Más allá de estas excentricidades, Puccini sabía exactamente lo que quería de sus actores cantantes y del escenario en el que trabajarían.

La iglesia de Sant’ Andrea della Vale tiene una disposición determinada que Puccini examinó y escribió específicamente música que subrayara la acción escénica en ese espacio. En la surrealista producción del director/diseñador de escena para el Teatro Real de Madrid, la capilla Atavanti, de crucial importancia, no está allí, de modo que el desventurado cantante que representa a Angelotti tiene que soportar ser tapado en un lienzo para evitar ser visto por Tosca en lugar de esconderse en la capilla.