Obra de teatro juan jose campanella

«el secreto de sus ojos» gana el premio a la mejor película de habla no inglesa

Vientos de agua es una miniserie argentina-española de 2006 creada por Juan José Campanella. La serie narra la emigración de un español a Argentina en los años 30 y, años más tarde, la de su hijo a la España actual. A través de este arco, la serie explora «…las diferencias y similitudes entre la inmigración de los europeos de principios del siglo pasado hacia aquí y ahora hacia allá»[1][2] Mediante esta metáfora de la inmigración, se comparan las vidas de los individuos y se descubre que tienen más en común que sus diferencias[3].

Se cree que las diferencias culturales entre los públicos a los que iba dirigida la serie provocaron una baja audiencia y la serie fue cancelada. La serie se emitió inicialmente en España en enero de 2006, en Telecinco. Aunque fue un éxito en Argentina, debido a los bajos índices de audiencia en España, se trasladó de la franja horaria de máxima audiencia a la 1 de la madrugada, lo que redujo su audiencia[4] Finalmente se canceló, posiblemente también debido a las descargas de series de Internet. La serie logró buenas ventas en DVD pero, a pesar de una campaña de apoyo para continuar en una segunda tanda, sólo se produjo una serie de 13 episodios.

Luna de Avellaneda (Juan José Campanella, 2004) [HD] (en inglés)

Ricardo Darín se ha convertido en el poco probable icono de mediana edad del cine argentino del primer cuarto del siglo XXI. En el contexto argentino, este mismo periodo está marcado por la crisis económica de 2001 y las celebraciones del bicentenario del país en 2010, que plantean importantes cuestiones sobre la identidad nacional. En este artículo se examinarán las películas que Darín realizó con Juan José Campanella y Pablo Trapero con el fin de considerar las formas en que su estatus de estrella se utiliza como una forma de reflejar o comentar ciertas cuestiones que parecen ocupar la psique nacional y comprometerse con las formas de masculinidad, ya sea para representarlas, cosificarlas, o incluso hacer ambas cosas simultáneamente. En las cuatro películas que hizo con Campanella, Darín interpreta a un hombre afable de clase media que, de alguna manera, es un extraño. El hecho de que al final de las películas los cuatro personajes hayan encontrado un cierto cierre y experimenten la sensación de un nuevo comienzo da fe de la fuerza de la masculinidad de clase media como categoría identitaria. Sus dos personajes mueren al final de las dos películas con Trapero. Estos personajes también son marginados, pero Trapero utiliza el estatus de estrella de Darín para llamar la atención sobre cuestiones sociales más amplias dentro de la sociedad argentina. En última instancia, ambos directores se basan en el personaje de Darín fuera de la pantalla para ayudar a la caracterización y vincular a sus protagonistas con cuestiones nacionales y de identidad nacional.

El secreto de sus ojos – Exclusiva: Juan José Campanella

La nostalgia por las películas «como las de antes» atormenta la mente del director argentino Juan José Campanella desde hace 20 años. Ese es el tiempo que ha tardado en desarrollar su último largometraje retro El cuento de las comadrejas. Tanto en el fondo como en la forma, la película rinde homenaje a las comedias clásicas de Ernst Lubitsch y Billy Wilder de la Edad de Oro de Hollywood.

Basada en uno de los dramas favoritos de Campanella, Los muchachos de antes no usaban arsénico, de su mentor José Martínez Suárez, The Weasels’ Tale le permitió evocar elementos estilísticos del pasado sin que parecieran irreales en un contexto moderno. Hizo una historia ambientada en el presente con personajes ancianos que destilaban manierismos de una época pasada. Su intención era crear el tipo de obra que ya no se hace, pero que él echa mucho de menos.

«Como espectador, cuando voy al cine hoy no me divierto tanto como hace 20 o 30 años. Las comedias de hoy no tienen diálogos ingeniosos ni giros inteligentes como las que yo veía cuando era niño», explica. «He perdido un poco el placer de ir al cine porque no me interesan la mayoría de las películas que se hacen hoy en día».

Vientos de Agua – Tango

El director de El secreto de sus ojos, que ganó el Oscar a la mejor película de habla no inglesa del año en 2010, acaba de debutar como director en el Teatro Fígaro de Madrid con Parque Lezama, que en Buenos Aires superó los 300.000 espectadores.

En 1984 u 85, fui a verla a Broadway porque su autor, Herb Gardner, había hecho una película llamada Mil payasos que me gustó mucho, y descubrí una obra que me cambió la vida. Su mezcla de comedia y emoción cambió mi estilo. Me sorprendió mucho. Además, trataba temas que siempre me gustaron y que no tenían que ver con la edad, sino con el conformismo y el compromiso, que es el tema principal. La estrenamos en 2013 en Buenos Aires y fue como hacer realidad un sueño.

Porque quería hacer muchas adaptaciones. No es una versión libre, pero hay una cantidad importante de adaptaciones. Al principio, el autor no me dejaba hacerlo. Luego, con el Oscar por El secreto de sus ojos, la viuda del autor me dio permiso. No vino a Buenos Aires, pero probablemente venga aquí, porque es la segunda versión más exitosa después de la de Broadway.