Teatre nacional de catalunya barcelona

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Los orígenes del Teatre Nacional de Catalunya ;están ligados a la tradición teatral del país, que siempre ha sido muy rica y creativa, además de atrevida, y así continúa en la actualidad. En los años ochenta, la sociedad catalana sintió que necesitaba un lugar donde actores y directores pudieran trabajar libremente. La creación del TNC también está estrechamente relacionada con el destacado actor Josep Maria Flotats, quien, tras regresar de Francia en los años ochenta tras el final de la dictadura franquista, asumió un papel destacado en la institucionalización del teatro catalán y se convirtió en el primer director del nuevo Teatre Nacional de Catalunya.

Desde su creación en 1996, el TNC ha vivido muchas etapas con diversas propuestas, pero siempre ha apostado por la máxima calidad y por ofrecer un espacio de promoción de otras disciplinas, como la danza, la ópera y los títeres. Hoy lo dirige Xavier Albertí con una programación variada, nacional e internacional. Además de disfrutar de alguno de los espectáculos que se representan, merece la pena visitarlo por el valor arquitectónico de su vanguardista edificio, obra del arquitecto Ricard Bofill.

Teatre Nacional T4 : TRAM Barcelona ( Alstom Citadis 302

Un espectacular edificio inspirado en la arquitectura griega, diseñado por el prestigioso arquitecto catalán Ricardo Bofill, alberga el Teatre Nacional de Catalunya. Situado en el Eixample barcelonés, este centro cultural impulsado por la Generalitat de Cataluña combina una programación de obras clásicas y contemporáneas con espectáculos de danza.

El arquitecto Ricardo Bofill se inspiró en la tradición clásica para diseñar el Teatre Nacional de Catalunya: el edificio recuerda a un imponente templo griego, con veintiséis columnas de 12 metros de altura, un enorme tejado a dos aguas y una escalinata de entrada rodeada de palmeras.

Inaugurado en 1996, ocupa 20.000 m2 y está rodeado por una zona ajardinada, que se utiliza para espectáculos al aire libre. El vestíbulo interior se concibió como una plaza pública cubierta, protegida por cristaleras y decorada con plantas de interior. Este ágora sirve para crear un teatro público que promueva la excelencia de las artes escénicas en Cataluña y sirva de punto de encuentro entre quienes las crean y su público.

Diamanda Galás – Angels (A.Ayler) (extracto/ Live in Barcelona)

Las circunstancias políticas que llevaron a la creación del TNC fueron la consecuencia de más de dos décadas de creación cultural tras la concesión a Cataluña de un Estatuto de Autonomía -que permitía las artes y la comunicación social en catalán.[2] Fue diseñado como un antiguo templo griego que se asemejaba a algunos otros Teatros Nacionales de finales del siglo XIX por el prestigioso arquitecto postmoderno catalán Ricardo Bofill i Leví. Su construcción se llevó a cabo entre el 8 de noviembre de 1991 y 1996[2][4] El resultado fue polémico, y algunos detractores lo calificaron de parodia o de mausoleo[2] La instalación muestra tres salas de teatro aptas para representaciones: Sala Gran, con gradas de teatro griego y capacidad para 866 localidades; Sala Petita, con gradas móviles y capacidad entre 266 y 500 personas; y Sala Tallers, con gradas móviles[5].

El Teatre Nacional de Catalunya se ha convertido en un ejemplo del papel político del concepto de Teatro Nacional a finales del siglo XX[2] Su perspectiva está ligada a la cohesión cultural y a la idea de Estado-nación: la institución pretende establecer una idea de identidad ligada a partir de símbolos y tradiciones históricas, lingüísticas y dramáticas. De este modo, permite crear un vector de autoorganización y la expresión de «imágenes nacionales»[1].

Hotel Teatre Auditori *** Barcelona – SM Hoteles

El Teatro Nacional de Cataluña es un gran edificio de cristal con aspecto de templo griego. Fue inaugurado en 1997 y diseñado por el famoso arquitecto Ricardo Bofill, también famoso por otros edificios en Barcelona como el Hotel Vela en el barrio de La Barceloneta. Este edificio tiene muchas características clásicas; el monumental vestíbulo contiene 26 columnas que evolucionan el estilo de un templo griego.El Auditorio de Barcelona, junto a este edificio, fue diseñado por el arquitectoRafael Moneo e inaugurado en 1999. El edificio se diseñó como centro de aprendizaje y como lugar para disfrutar de la música. Los orígenes del mercado Encants BCN se remontan al siglo XIV, lo que lo convierte en uno de los mercados más antiguos de Europa. Lo visitan unas 100.000 personas a la semana, deseosas de encontrar gangas entre sus muebles antiguos, ropa de segunda mano, libros y discos antiguos, u objetos de coleccionista.